tartamudo

Tartamudez o Balbuceo

La mayoría de las personas usa los términos tartamudez y balbuceo indistintamente, aunque algunos profesionales los distinguen de manera diferente. Algunos consideran que la palabra «tartamudez» es más común en Estados Unidos, mientras que «balbuceo» se usa más en el Reino Unido. Otros hacen una distinción técnica: clasifican a los tartamudos como aquellos que tienen problemas al pronunciar la primera parte de las palabras, y a los balbucientes como quienes tienen dificultad para completar las palabras. También hay quienes afirman que la tartamudez se refiere a la repetición de letras iniciales de una palabra, como en “s-s-s-sabor”, mientras que el balbuceo implica quedarse atascado al inicio de cada tercera o cuarta palabra. Según esta última definición, el cantante de country Mel Tillis sería considerado un tartamudo, mientras que el rey Jorge VI, retratado en la película El discurso del rey, sería un balbuciente. Para los propósitos de esta sección y en la aplicación de la hipnoterapia al problema, trataré ambos términos como sinónimos. 

La tartamudez tiene dos orígenes distintos, de los cuales uno es tratable con hipnoterapia. Para la mayoría de las personas, la tartamudez es un comportamiento desarrollado, generalmente durante la infancia, aunque en casos raros puede aparecer más tarde. En estas situaciones, la hipnoterapia es bastante efectiva. Sin embargo, la tartamudez también puede deberse a causas físicas, como un trauma cerebral. Por ejemplo, cirugías cerebrales agresivas pueden provocar problemas del habla como la tartamudez.  Aun así, incluso para las personas con problemas físicos, recomiendo probar la hipnoterapia como una oportunidad para reescribir algunos patrones subconsciente.

La hipnoterapia no solo ayuda a explorar las causas de la tartamudez de un cliente, sino que también proporciona las herramientas necesarias para desarrollar y ejecutar un plan terapéutico. Esta ha demostrado ser consistentemente beneficiosa para quienes buscan ayuda para superar la tartamudez, a veces con historias de éxito muy públicas. Una de las voces más reconocidas de todos los tiempos, la de Darth Vader, alguna vez fue una voz tartamuda. James Earl Jones resolvió su problema de tartamudez mediante hipnoterapia, lo que le permitió desarrollar la voz que conocemos hoy. El actor Bruce Willis también superó un problema de tartamudez con hipnoterapia.

Todo el mundo tartamudea ocasionalmente. Es normal tener lapsos momentáneos al hablar debido a la búsqueda de la palabra adecuada o distracciones. Pero para la mayoría de las personas, estos pequeños desafíos no se convierten en problemas continuos. En los tartamudos, esos pequeños inconvenientes escalan a dificultades mayores, y estas dificultades ocupan un lugar prominente en cada intento de hablar.

Terminar con el tartamudeo

La naturaleza de las causas de la tartamudez determinará el desarrollo del plan de hipnoterapia del cliente. Este plan está siempre orientado al futuro. El enfoque de la terapia con respecto a las causas principales variará según el caso. Una vez abordado el problema de las causas, la terapia se enfocará en pasos para cambiar comportamientos.

Estos pasos incluirán aplicaciones en la vida real, informes y evaluaciones. La terapia trabajará para eliminar la percepción negativa de uno mismo y los pensamientos negativos, mientras se fomenta la confianza y el disfrute en la comunicación, permitiendo que el habla fluya de manera fácil y natural, como debería ser.

El proceso de hipnoterapia para clientes con tartamudez es generalmente a corto plazo, en comparación con otras formas de asesoramiento y terapia. Serán necesarias varias sesiones para confirmar el éxito y realizar los ajustes necesarios. Recordemos que el objetivo de toda hipnoterapia es un cambio de comportamiento permanente, por lo que las sesiones se programarán con el fin de garantizar el éxito a largo plazo.

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