Sin lugar a dudas, la capacidad de comunicación con los demás y de forma precisa, es lo que hace diferentes a los seres humanos del resto de los animales. Pero, ¿se comunica todo el mundo con la misma eficiencia? No hace falta que te conteste, porque ya conoces la respuesta.
A lo largo de tu vida te habrás encontrado con personas de todo tipo, desde las que aparentemente poseen un don para la comunicación, hasta las que lo hacen con torpeza e incluso despreocupación.
Cuando nos encontramos ante un buen comunicador, todo es más sencillo. Si se trata de un profesor que imparte alguna materia en nuestro plan de estudios, será más fácil que capte nuestra atención e incluso nuestra memoria se verá recompensada.
Si es un comercial que trata de vendernos algo, será más fácil que lo adquiramos, incluso si no lo necesitamos.
Todas estas personas tienen en común algo muy importante, una cara sonriente. Pero no exhiben una sonrisa forzada y antinatural, no. Sonríen del modo adecuado ante cada situación y por lo general es un estilo moderado.
Sonreir es tan importante que cada año en octubre se celebra el día mundial de la sonrisa, se hace el primer viernes de ese mes.
¿Cómo te afectará a ti sonreír más?
Recibir sonrisas de los demás nos afecta de formas muy beneficiosas, una de ellas es que la presión arterial decrece. Este efecto lo produce nuestro subconsciente, ya que un ambiente donde se sonríe mucho, es un ambiente afable y por lo tanto no hay de qué preocuparse.
Si tenemos en cuenta esto y que sonreir a otros es la mejor forma de recolectar sonrisas para nosotros, solo con nuestra expresión facial obtendremos beneficios para nuestro bienestar.
Aquí no estamos hablando de una sonrisa sana desde el punto de vista de salud bucal, ya que la salud dental poco tiene que ver en esto. Tampoco nos referimos a que sea preciso poseer una sonrisa bonita, no. Nos referimos a la importancia que tiene la sonrisa en las personas que sonríen habitualmente en su día a día. Esas personas son más felices porque están emitiendo, con frecuencia, señales a su subconsciente para que se sienta de ese modo.
Como ves, sonreír no solo puede aportar positividad a tu día a día, sino que además lo hará de una forma muy eficiente, por ejemplo al reducir los niveles de estrés. El estrés conlleva inquietud, seriedad y tensión y todo ello es incompatible con la sonrisa. Si aplicas la sonrisa por norma, a la larga tu subconsciente la aceptará como la opción por defecto.
Por tanto, cuida la salud con el sencillo acto de sonreír a menudo, tu sistema inmunológico también te lo agradecerá, como avalan innumerables estudios científicos.
¿Cuál es la importancia de la sonrisa en el trabajo?
De nuevo la estética dental tiene poca importancia en este contexto y lo realmente importante en tu ambiente laboral será que sonrías. Esto debes hacerlo tanto con tus compañeros de trabajo como con tus clientes. Ello propiciará que el ambiente laboral sea lo más agradable posible y esto te retribuirá dividendos de satisfacción personal.
Es más agradable acudir diariamente a un puesto laboral donde el ambiente sea agradable y las sensaciones percibidas sean satisfactorias. Por lo que sembrar ese tipo de recompensas con tu sonrisa, será sencillo y tremendamente gratificante a corto plazo.
Si tomamos 1.000 personas como caso de estudio, encontraremos que solo 50 personas de las seleccionadas sonríen de forma sistemática en su jornada laboral y son precisamente esas 50 las que obtienen más éxito y reconocimiento por parte de los demás. ¿A qué esperas para convertirte en una de ellas?
Referencias Bibliográficas:
- Ekman, P. (2012). Emotions Revealed. Londres: Weidenfeld & Nicolson.